La familia y la granja están fuertemente interrelacionadas; la familia proporciona la mayor parte de la mano de obra y controla los principales recursos en los que se basa la granja. La familia y la granja representan una unidad que evoluciona continuamente, cumpliendo funciones económicas, medioambientales, sociales y culturales de la economía rural en general y dentro de las redes territoriales en las que están incluidas. El Año Internacional de la Agricultura Familiar (AIAF), celebrado en 2014, logró situar a la agricultura familiar en el centro de las políticas agrícolas, medioambientales y sociales de los programas nacionales, regionales y mundiales, y determinó las necesidades y las nuevas oportunidades de fortalecer los compromisos políticos para reformular los programas y los arreglos institucionales en beneficio de la agricultura familiar. El 20 de diciembre de 2017, la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su período de sesiones 72, proclamó el Decenio de las Naciones Unidas de la Agricultura Familiar 2019-2028. La Década de la Agricultura Familiar tiene dos objetivos transversales: la promoción de los jóvenes agricultores familiares y la promoción de la igualdad de género en la agricultura familiar.
- ¿Qué instrumentos son necesarios para promover la igualdad de género en la agricultura familiar?
- ¿Qué buenas prácticas existen para lograr los derechos de las mujeres y la igualdad de género en la producción de alimentos y agricultura?
- ¿Qué instrumentos reales de integración socioeconómica pueden utilizarse para que los jóvenes se integren en el marco adecuado de la agenda de la agricultura familiar?
- ¿Cuáles son las barreras para la integración de los jóvenes en la agenda de la agricultura familiar?
Estas y otras preguntas fueron respondidas por los ponentes y participantes de la sesión técnica titulada “El Decenio de las Naciones Unidas de la Agricultura Familiar – La mujer y la juventud como objetivo transversal”, organizada conjuntamente por los Comités de la Mujer y la Juventud de la OMA en el marco de la Asamblea General de la OMA 2019, que tuvo lugar en Luxemburgo del 20 al 23 de mayo de 2019.
Entre los ponentes que participaron en el debate se encuentran Anna Korzenszky, Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO; Jannes Maes, Consejo Europeo de Jóvenes Agricultores, CEJA; Dimakatso Sekhoto, Asociación Africana de Agricultores de Sudáfrica, AFASA; Luc Emering, Lëtzebuerger Landjugend a Jongbaueren, LJBJW; Judith Kons, Foro Mundial para la Alimentación y la Agricultura, GFFA; Denis Kabiito, Federación de Jóvenes Agricultores de Uganda, UNYFA; Saquina Mucavele, Mulher, Género e Desenvolvimento, MUGEDE; Nandini Azad, Indian Co-operative Network for Women, ICNW; Auxtin Ortiz, World Rural Forum, WRF; Kati Partanen, Unión Central de Productores Agropecuarios y Propietarios Forestales, MTK; Torben Nilsson, Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola, FIDA.
Aquí hay 10 temas generales del evento que vale la pena recordar:
- Los agricultores familiares pueden contribuir realmente al desarrollo sostenible, cuando se les apoya y empodera;
- Si la juventud no permanece en la granja, ¡no tendremos ninguna granja en el futuro!
- Exponer a los jóvenes a la agricultura, mostrarles que hay oportunidades, ¡es el punto!
- La agricultura es extremadamente compleja y lo que más se necesita es educación;
- Se necesitan precios más equitativos para que las mujeres y los jóvenes agricultores puedan dedicarse a la agricultura;
- Diseñar e implementar políticas específicas para el empoderamiento de las mujeres agricultoras: Si apoyamos a las mujeres, apoyamos a todo el sector agrícola;
- Programas de Igualdad de Género más holísticos. El poder de decisión de las mujeres es fundamental para lograr la igualdad de género en la agricultura familiar;
- Los jóvenes y las mujeres agricultoras merecen sentarse alrededor de la gran mesa, participando en todos los debates;
- Promover el acceso de los agricultores familiares a la información y al conocimiento;
- Más inclusividad: los agricultores deberían participar más en el proceso de elaboración de políticas.